Tesla y Nio son los dos íconos del sector de vehículos eléctricos. Y en 2020, fueron grandes protagonistas del mercado, multiplicándose el precio de sus acciones varias veces y en consecuencia, la valuación de mercado de esas empresas.
Y si bien en muchas oportunidades suelen ser presentadas como dos alternativas similares a la hora de invertir, la realidad es que Tesla y Nio, lo único que comparten son sus esfuerzos en el campo de los vehículos electrónicos, y no mucho más.
Historia
Tesla es una empresa fundada en Palo Alto, California en el año 2003. Su primer proyecto fue el Tesla Roadster, un vehículo de características deportivas y apuntado al segmento premium, con el objetivo de generar fondos para iniciar líneas de producción de automóviles más accesibles.
En noviembre de 2016, Tesla adquirió a la fabricante de células fotovoltaicas SolarCity que dio un inicio a un proceso de integración vertical del negocio, donde Tesla aspira a dominar desde la generación de la energía, hasta el almacenamiento y cargadores para los autos.
Otro de los grandes estandartes de Tesla es poseer una de las tecnologías más desarrolladas en materia de vehículos autónomos.
Nio, en cambio, es una empresa mucho más joven. Creada en China, en el año 2014. Al igual que Tesla, Nio se enfoca principalmente en vehículos de alta gama, y en la actualidad ofrece cuatro modelos distintos.
Con una estrategia similar a Tesla, Nio lanzó su primer modelo, un “superauto”, en 2016, con una producción limitada de apenas 16 unidades. A finales de 2017, lanzó su primer modelo de producción en masa, el ES8, comenzando las entregas en junio del año siguiente.