Por estos días el bitcoin volvió a las páginas principales de los portales de noticias y se convirtió en tema de conversación una vez más.
Los titulares ya no anuncian la «muerte» del bitcoin sino que van relatando su precio día a día como si fuese un partido de fútbol.
Los jugosos retornos del bitcoin medidos en dólares, y los constantes retornos después de haber sido dado por muerto, han sido la mejor estrategia de marketing hasta el momento en los últimos 12 años para la moneda digital.
Cada cuatro años, hasta el momento, siempre ocurrió lo mismo. La emisión de nuevos bitcoins se reduce a la mitad (esto seguirá ocurriendo hasta el año 2136), poniendo más presión sobre la oferta, impulsando su precio. .
Una vez que se activa este evento, conocido como halving (el último fue en mayo), se incrementa la presión sobre la oferta, y el precio del bitcoin entra en una trayectoria parabólica, que en los ciclos anteriores se extendió durante 18 meses.
Los años 2013 y 2017 marcaron el final del movimiento alcista del bitcoin de esos ciclos y también fueron en esos años donde más gente escuchó hablar del bitcoin por primera vez.
En 2013, bitcoin pasó de valer unos US$12 a más de US$1000, mientras que en 2017 pasó de US$215 a US$20.000. Ambas subidas fueron acompañadas por fuertes correcciones, superiores al 80%.
La inversión de la década
A finales del 2019, en los clásicos repasos de fin de año, y en ese caso de fin de década, todas las publicaciones financieras con honestidad intelectual tuvieron que bautizar, a regañadientes, al bitcoin como la «inversión de la década».
Sí, en su primer década, bitcoin se convirtió en «la inversión de la década».
Excepto en 2014 y 2018, bitcoin superó por lejos a cualquier otra clase de activos. Y los resultados de cualquier otro activo. Netflix, por lejos, le sigue como la segunda mejor inversión de la década pasada.
Si no es una inversión, ¿qué es?
Y cada vez más, Bitcoin atrae la atención de Big Money.
Quienes compraban bitcoin con fines meramente especulativos durante el ciclo alcista anterior, fueron desplazados por los jugadores institucionales del mercado.
Por ese motivo, también es probable que no volvamos a ver correcciones del 80%.
Fondos de inversión, bancos, brokers, aseguradoras y empresas, de a poco, comienzan a entender el poder del bitcoin y a mover parte de su patrimonio.
Y compraron con el plan de mantenerlos durante mucho tiempo.
Leyendas del mundo de las finanzas como Stanley Druckenmiller, Bill Miller o Paul Tudor Jones son bitcoiners.
La segunda persona más rica de México, Ricardo Salinas Pliego, tiene el 10% de su patrimonio liquido en Bitcoin.
Michael Saylor, CEO de Microstrategy, una empresa de software que cotiza en bolsa, cambió todo el efectivo del tesoro de la compañía, y tomó deuda, para comprar 70.470 bitcoins.
La lista sigue, pero no es muy larga. Tiene mucho, mucho espacio para seguir creciendo.
Hoy el tamaño total del bitcoin representa unos US$800.000 millones. Una suma ínfima en comparación con el oro que representa unos US$10 billones (13 veces más)
Y todo esto dentro de un gran esquema de más de US$250 billones en activos considerados de resugardo de valor. La gran pregunta es ¿qué porcentaje de ese océano de valor estará en bitcoin?
En este post de Visual Capitalist hay una infografía que pone en dimensión el tamaño del bitcoin, frente al resto de la economía global.
Estos son algunos de los factores que hacen de bitcoin un protocolo que aspira atraer el valor equivalente a cientos de miles de millones o billones de dólares que hoy están almacenados en activos de menor calidad. Más vulnerables.
Y los megamillonarios lo saben. Grayscale Bitcoin Trust, un trust que permite a inversores institucionales acceder al bitcoin de forma sencilla, está comprando más bitcoins de los que se generan. Y junto a ellos, PayPal se ha sumado a alimentar la demanda.
Es posible que en los próximos meses seamos testigos de una crisis de liquidez del lado de la oferta. Quienes entienden bitcoin, no quieren venderlos.
Que no haya los suficientes bitcoins para empresas, fondos, y otros inversores institucionales que mudarán parte de sus patrimonios a la red bitcoin.
El efecto de una crisis de liquidez del lado de la oferta es un fuerte de ajuste del precio al alza para satisfacer la demanda.
Los 21 millones de bitcoins ya suenan escasos si los comparamos con los 15 millones de millonarios que hay en Estados Unidos.
Todavía es posible para los individuos comprar alguna fracción significativa de bitcoin. Si buscamos la cantidad de bitcoin por persona, dividiendo el circulante por la población mundial a cada persona le correspondería 0.00230400 bitcoin (o 230.400 sats). A precios de hoy (US$43.000) unos US$99.36 por persona.
Mucho más que una inversión
Bitcoin es mucho más que una inversión. Los beneficios de tener Bitcoin no solo se derivan de su apreciación, si no de las garantías que ofrece la red en torno a soberanía individual.
A medida que se desarrollen disintos planes en torno a las Monedas Digitales de Bancos Centrales (CBDC), los peligros del dinero digital centralizado serán más patentes y claros para el grueso de la población. La disminución del uso del dinero físico (una tendencia que ocurre a nivel mundial) anticipa que el papel y las monedas están comenzando un proceso paulatino de desaparición. Bastante avanzado en el norte de Europa y en Asia.
Bitcoin es una alternativa al dinero digital centralizado, administrado por un banco central, con más poder que nunca para inflar la base monetaria, congelar cuentas, brindarle herramientas al gobierno como una moneda que tenga"vecnimiento" o que vaya perdiendo poder de compra deliberdamente si se la ahorra. Mecanismos para "estimular el consumo".
En definitiva, este nuevo escenario alterará también los incentivos para mover la parte líquida de un patrimonio a una red monetaria distinta. Ya no será solamente una inversión, sino una necesidad. Lamentablemente, el futuro, sin Bitcoin, en materia de vigilancia y restricciones a las libertades es muy oscuro.
Entender lo que uno está comprando, y donde uno esta poniendo el fruto de su trabajo (su dinero) es fundamental para tener éxito en cualquier decisión, tanto en una inversión como cuando adopta un nuevo protocolo para almacenar riqueza.
{"email":"Email address invalid","url":"Website address invalid","required":"Required field missing"}
Seguí las últimas tendencias del mercado con nuestro newsletter
Recibí en tu correo todas las semanas un análisis de los mercados y hechos de actualidad que pueden impactar en tu economía. Nuestro boletin semanal es totalmente gratis!